martes, 26 de octubre de 2010

una linda historia y un final repentino.-

Escribir; No lo hago para que la gente lo lea ni para que sientan compasión de mi, lo hago porque creo que es una de las maneras más bellas para expresar esos inexplicables sentimientos.

Era hermoso, una sensación bellísima que parecía no tener fin hasta que en 2 minutos todo en mi vida cambió, quizá te suene un poco exagerado, pero ahora me doy cuenta que en esos 2 minutos mi vida efectivamente cambió, se volvió más fría, más triste, con muy poco sentido, para no decir que ya no tiene sentido, al fin y al cabo, sigo respirando y con los mejores amigos que uno puede pedir.
Todos dicen que tú no vale la pena, que tú no me mereces.
Que te olvide, me dicen todos. Un día cuando traté de convencerme que te tenía que olvidar, duré 4 días en esa inmensa agonía, me alejé de ti y me acerque a otra gente… De lo único que me di cuenta fue que mientras más me alejaba de ti, más te extrañaba.
Eras gran parte de mi vida, y lo sigues siendo, cada largo suspiro se debe a ti, a la tristeza y a los hermosos recuerdos que giran en torno a ti, no creo que te des cuenta, y menos quiero generar lastima, solo quiero que pase lo que pase, no me gusta forzar las cosas.
Ese sufrimiento; Es raro, inexplicable, doloroso, ya me acostumbré a él. Muchos dicen que es ridículo, pero yo no planeo olvidarte, o por lo menos no a la fuerza. Es increíble como la vida sigue, pero yo no progreso con ella, cuando veo la lluvia, pienso en ti, cuando veo ese largo parque, pienso en ti, cuando suspiro, pienso en ti, cuando lloro, pienso en ti, cuando rio, pienso en ti, cuando veo el cielo, pienso en ti, y cuando pienso mucho en ti, el dolor que siento es profundo.
Esa frase que aquel día salió de tu boca; “No estés triste”… claramente no me llegó, lo único que me llego fue el apoyo de todas las personas que si merecen mi cariño.
Consejos, consejos, consejos… la mayoría en vano. Creo que el mejor consejero es el corazón, y creo que me dijo lo contrario a todos los consejos. Lo que sigue de mi lucha, probablemente sea toda en vano, pero bueno, así soy yo, no me rindo fácil.
Mayo, pero que bonito mes, de lo único que me acuerdo es del comienzo, pero no del final, es una de las pocas cosas que trato de borrar de mi memoria, aunque no debería borrarla, porque cada detalle es parte de esa historia, historia que no está escrita en papel, solo escrita en mi mente, y no sé si en la tuya, eso solo tú lo sabes.
Si algún día lees esto, probablemente quieras alejarte aun más de mí, es tu decisión, yo ya no puedo hacer nada, o por lo menos nada que se me ocurra.
Eres experto en encantarme, eres experto en hacerme feliz. Claro que ya no es el caso, porque ahora tan solo quieres que seamos “amigos”, tristemente para que seamos amigos, PRIMERO; te debo olvidar. SEGUNDO; tengo que lograr ser tu amiga.
Creo que eso tomara tiempo, sobretodo porque no sé cuando te olvidare.
No tienes porque volver a fijarte en una persona como yo, mucha gente anda detrás de ti… uhm si, estoy triste. No sé en qué te fijaste cuando yo te gustaba, pero al fin y al cabo ahora da lo mismo. Creo que es pasado. Pero tú para mí sigues siendo presente, porque tú estás presente en mi mente día y noche, aunque yo quiera o no.
El amor es algo incontrolable, algunas veces se vuelve una obsesión, pero este no es mi caso, simplemente te amo.
Quizás no te lo dije a tiempo, la verdad nunca te lo dije, quizás no te diste cuenta, pero todos somos distintos y creo que todos merecemos una oportunidad, todos somos libres en todo momento, incluso en la cárcel, en cierta manera.
Eres mi pasado, mi presente, y el destino decidirá si serás mi futuro. No lo sé, no sé que dirás, que pensaras cuando leas esto, si es que lo lees, porque con suerte me hablas, con suerte me saludas, no sé si hice algo malo, algo que no te gustó, y si fue así, me gustaría saber que error cometí, porque todos saben que DE LOS ERRORES SE APRENDE. Pero errores como estos, son los que más duelen.
Ya no sé a quién creerle, casi todos me han mentido en cosas, cosas que hacen ilusionarme o entristecerme, solo te creo a ti, pero como ya no hablamos, no le creo a nadie, ni siquiera sé si creo en mi misma, pero si creo en el amor, y el amor no es el culpable, no sé si habrá un culpable.
Gracias; Gracias por esos hermosos momentos, por esos abrazos y por esos besos, gracias por cuidarme y gracias por amarme.
Solo con verte, me iluminas el día, solo por el hecho que sé que estas ahí, que sigues tu vida aunque yo ya no esté en ella. No tengo idea de lo que sientes y me gustaría saberlo, yo ya no aguanté más y lo siento si te incomoda, pero era necesario.
Me gustaría gritarlo a los 4 o 5 o 6 vientos, a los que sea necesario, quiero llorar, quiero reír, quiero ser feliz.
Alegría; Que bella palabra. No puedo decir nada más de ella.
Debería ser una mujer completamente feliz, pero no lo es, tu no eres el culpable, simplemente es la situación.
Me gustas, ya te lo dije, y creo que te sentiste incomodo, no sabias si te alegraba, no sabias si te daba lata, ni yo sabía que sentías. No sé si sirva decírtelo denuevo, creo que te molestaría, creo que ya estas harto de mi y tienes razón para estar harto de mi. Lo siento si te molesta, pero te amo.-
Para terminar de expresar lo que siento, me faltarían hojas y hojas, y tiempo, mucho tiempo.

Gracias por esos lindos momentos que pasamos, quiero que sepas que te sigo amando.-

PD: LA MAYORIA SABE PARA QUIEN VA.









Lorenza Tael~

domingo, 3 de octubre de 2010

gracias.-



Tantas risas, tantas lagrimas, tantos suspiros, tantas palabras, quizá demasiadas.

La vida, la vida no se puede describir en palabras, tampoco en acciones, ni siquiera en sentimientos.
Entonces, ¿de qué sirve la vida?
Nos alegra, nos entristece, nos enoja, de nada concreto.
¿Es una persona?
No, pero está compuesta de 4 letras que al pronunciarlas todas juntas tiene un sonido armonioso.
¿Qué hago con la vida?
Difícil, lo que uno quiera, pero siempre disfrutándola y aprendiendo de ella.
Aprender; aprender me suena a profesores, al colegio.
No me gusta el colegio, no del todo.
Suena como de adulto decir que debo “aprender de la vida”.
No, no tengo que “aprender de la vida”, tengo que aprender a estar agradecida de ella.
¿Por qué?
Bueno, hacemos muchísimas cosas de las cuales no agradecemos ni siquiera una.
Que triste.
Caminar; caminar es fácil si tengo dos piernas, así es.
¿Y los que no tienen dos piernas?
Agradecen lo que si tienen.
Entonces, ¿Los que tenemos más cosas, somos más desagradecidos?
Generalmente.
“Uno no se da cuenta de lo que tiene, hasta que lo pierde o hasta que está a punto de perderlo”
Si, es triste, pero cierto.



Lorenza Tael.-